Bueno bueno! Resulta entonces que al final volví. Y no me lamento, porque la verdad que soy un tipo urbano y todo tiene su límite. Pero cómo no compartir lo lindo que fueron para mí estas vacaciones!Todo empieza como se ve aquí, 4 locos en un Reanult 21 Nevada. De izquierda a derecha: Julio, Waldo, Yo y Guille.
Y podría en este momento expanderme en detalles y anécdotas, pero eso pueden leerlo de la mano de mi amigo J, en este emotivísimo post. Lo que sí quiero hacer, es agradecer mis tres compañeros por compartir tan agradables momentos. Tengo que admitir que en algún momento pensé que quizás yo no iba a encajar en este grupo selecto de personas. En algún punto yo era el más extranjero de todos, no por mi pinta de holandés, sino más bien porque Julio, Waldo y Guille ya se conocían bastante.
Pero qué alegre estuve al darme cuenta de que encontrar un lugar en el que nos vendieran pizza libre por sólo 10 pesos por cabeza no sólo era causa de mi felicidad suprema... sino también del grupo entero!!! Nuestras sonrisas lo dejaban en evidencia y hasta la moza era algo que nos ponía muy felices :). Es claro que compartíamos mucho más de lo que yo había imaginado, y las increíblemente distintas personalidades estuvieron de acuerdo en complementarse de milimétrica manera. La guitarra estuvo siempre bien acompañada y así también estuve yo.
Y entonces, de repente, llegó el último día. Pero nos habíamos sentido tan bien, y había sido tan importante ese encuentro en aquél camping de Gesell, que nadie sufrió que las vacaciones acabaran. Y es que el gusto quedó en el paladar. El gustito de la gran amistad, de la gente increíble que conocimos, de los tequilas en la playa y la tibieza de un fogón, de los chistes internos (muy internos) y de la perplejidad de la gente ante nuestras perenes sonrisas. Quién sabe cuándo volveremos a vivir momentos como estos (y es fácil... como estos no habrá otros). Pero si puedo pedir un deseo, expresar un anhelo... no lo dudo: ¡¡que se repita!!Un gran abrazo a mis compañeros de viaje. Y como ya es tarde, y si Luquitas estuviera por acá estaría yendose a dormir... les dejo un archiconocido (por nosotros) "¡¡Good Night!!"
4 comentarios:
Pero veo que ha pasado usted unas vacaciones impagables!!!! Cuánto me alegro. Es muy gratificante eso de descubrir que tenemos con los demás más cosas en común de las que pensábamos...
Con respecto a mi fotolog, sí, por suerte es sólo de a ratos que me siento molino. Si fuera un estado permanente, mi Dios, no sé qué haría. A veces soy molino, pero con lindo viento soplando, y entonces puedo sacar agua hasta de la tierra más aparentemente seca, otras veces soy viento en molino ajeno. Otras veces simplemente soy yo. En fin, como ve, soy muchas.
Me alegro de su regreso y espero que siga escribiendo, porque yo sigo leyendo.
Un beso enorme!
Snif! Vacaciones con amigos... ay, ay! Me alegro, "muy de verdad", de que hayan sido tan divertidas y que hayan disfrutado los cuatro.
En fin, feliz año! (una vez más)
Saludos :)!
Hola Darta!
Parece que agitar en este blog funciona!
Mire no sé si su veraneo fue fashion, pero sí comparto con usted que no podría haber elegido mejor compañía (¿fanática yo?)
De todos modos, me gustaría un touch más de estilo descriptivo, no crea que me voy a confirmar con tan breve relato, caballero.
Ah, por si gusta le dejé un par de reprimendas (antigua palabreja si las hay) en mi blog.
Un placer volver a verlo.
Querida Sugus: No está entre mis intenciones, lamento decirle, la de relatar mis vacaciones. Pero Julio hizo una buena síntesis quizás en clave juaz. De cualquier manera, sepa que no se equivoca respecto de la compañía que tuve (claro, eso ya lo sabe, déjeme ser redundante a manera de halago hacia los consabidos :D). Si hay algo que me encanta es el estado en que está uno cuando sólo se encuentra en esa transición. El viaje. Estar a la espectativa de qué hacer, y hacer lo que sea que fluya en el momento. Todo un privilegio. Un abrazo grande!
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